Una de las dificultades que Teo tenía desde chiquita eran los rostros, no los rostros de las personas, si no eran las caras de las fotos, cuadros, dibujos, etc.

En el jardín ella comenzó poco a poco a mostrar molestias por estar dentro de la sala, comenzó a sentarse mirando hacia atrás para evitar mirar al frente (donde estaba la pizarra), luego ya esto se transformó en angustia para ella, no podía entrar a la sala, cuando entraba lloraba y quería irse a la casa. Al lado de la pizarra habían unas caritas sonrientes grandes (dibujadas) en donde las tías ponían las fotos de los niños que estaban presente, eran dos caritas, una de niño y otra de niña.
Yo sospechaba la razón de lo que le estaba molestando, pero le pedí a la psicóloga de Teo que vaya al jardín para ver a Teo en sala y claro, era eso! Desde ese entonces las caritas fueron tapadas con papel blanco, Teo nunca estuvo 100% relajada en esa sala, porque sabía que atrás del papel blanco estaban esas caras, pero sí pudo tolerarlo y cada vez que se sentía mal salía a dar una vuelta al patio.

En casa tuve que sacar todos los cuadros de las paredes, ya que Teo empezó a entrar con los ojos cerrados al living, después entraba agachada y al final ya no quería entrar, primero los tapé con sabanas, pero ella iba para ver si seguían abajo… se esforzó al máximo para tolerarlo, así que cuando vi que ella ya no lo podía soportar decidí sacar todo, fue un alivio tremendo para ella.
Los peluches de su habitación y pocas muñecas que tenía las guardamos, y a sus favoritos les pusimos lentes de sol.
También las publicidades en la calle donde habían caras gigantes le molestaban mucho, cada vez que pasaba cerca se tapaba los ojos y en ese caso lo que hice fue evitarlas cuando se podía. Fue una etapa difícil y larga.

¿Por qué les cuento esto?
Porque a raíz de esto comenzamos a trabajar mucho los rostros, y comenzamos con los animales que eran sus favoritos y una de las actividades que hicimos fue esta, ponerle las caritas a los animales, hicimos muchas diferentes! Mi idea era que ella lo vea como juego, con caritas simples y sin mucho detalle en las miradas.

Les adjunto uno de los que hicimos, es muy lindo, se recortan las caritas que vienen aparte y el niño debe pegarlas en el animal que corresponde, se trabaja vocabulario, atención, coordinación ojo mano.

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